viernes, 26 de febrero de 2010

La serpiente gris, la sabiduría y el Hombre-Crisis

Está la luz de la tristeza alumbrando mi sonrisa y exploto y genero rabia, descanso me falta!!!!

Entra el ángel de la guarda y me mira y me da pena que esté cerca para ver la realidad, aun así me sonríe, él no cree en la mala vida.

La pregunta y el afán de ayudar desde la tranquilidad, vaaaale, dice.
Por qué no me dejas a mí primero y luego a Pablito…muchas veces, lo he de probar.

Estrés de cuidadores a tiempo completo que conducen máquinas de estrés matinal.

Fuerza y no compresión, chándal morado, fachada amarilla, banderas ajadas, personal con ganas de terminar un error extraño.

Calles mal asfaltadas no hay Mac-Auto para pedir, sin bajarte del coche… si va solo el cuidador de turno.

Saludo grande, moreno, radiante y andaluz, es grato, el día a día es distinto, me gusta su calma, no sus tiempos… bueno sí pero no me los permito.

… y en medio, la sabiduría para aguantar, disfrutar y estar contentos, con el simple hecho de correr al pilla pilla….

No os trajo el viento, si no el amor, por eso os amo como a los niños maravillosos que sois.

Me deslizo por la serpiente gris, con el resto de compañeros y escucho las ondas del cielo, plomizo últimamente. El sol raso me gustaba más.

Vorágine envidiada que me ocupa y me distrae, me pasa el tiempo a la madurez y el chiquito de mi interior ni se entera!!!!
Resuelvo problemas, daños, gestiono desgracias. S.A. menos personales, más caras.

Somos Tíos otra vez, bueno los de montes exploradores, por partida doble.

No os había dicho que en medio de todo esto la sabiduría para mantenerse ahí, perdura, gracias a Dios

Hombre-Crisis que tú conoces los límites de la vida, el borde de la existencia, haciendo equilibrios ha vuelto haciendo aspas con los brazos para no caer y con una sonrisa en la cara para que seamos felices de una vez por todas.

Gracias.